Ventaja para el atrevido
Hay muchas maneras de conseguir clientes.
Unas funcionan mejor, otras peor.
¿Cuántas veces has colgado a ese teleoperador que te despierta a la hora de la siesta para cambiarte de compañía telefónica?
¿Cuántas veces has huido por los pasillos de El Corte Inglés de ese señorito sonriente, disponible y amabilísimo que te pregunta si te puede ayudar?
Son formas de perseguir al cliente.
No digo que alguno no acabe comprando.
Pero por lo general, cuelgas y huyes porque esos vendedores están mostrando necesidad y una cierta desesperación.
Y las personas huimos de eso.
Es psicología básica.
Vale para las ventas, vale para el amor.
Olemos la necesidad y nos produce rechazo.
Igual que los perros huelen el miedo y te ladran.
Yo no sé si tú vendes algo o no.
Servicios, productos, ladrillos o tornillos.
Da igual lo que sea.
Hay una forma mucho más sutil de estar ahí, insistiendo, pero sin perseguir a nadie.
Con dignidad.
Todo empieza con 10 correos, y luego tú ya ves cuantos más correos quieres mandar después.
Te aseguro que te va a gustar.
Y te aseguro que vas a querer mandar más.
Es la forma más rentable de vender online que conozco.
¿Y por qué solo unos pocos la utilizan?
Porque los que no lo hacen tienen miedo, pero esto les da ventaja a los que se atreven.
Ya lo he dicho, todo empieza con 10 correos...
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